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La medida de confinamiento obligatorio, ha agravado situaciones de violencia que se viven en la parte rural del país, entre esos las del pueblo Wiwa, ubicado cerca del municipio de Dibulla, Guajira, quienes desde hace 6 años tienen conflictos con un grupo de minería ilegal.
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Desde el 25 de abril, la comunidad de Arimaka en compañía de niños, ancianos, autoridades ancestrales, mamos y el resto de la comunidad, realizan una asamblea permanente en el espacio disputado con el grupo de minería legal con quienes hace 4 años disputan en el territorio.
Arimaka pertenece al territorio considerado ancestral para ser protegido y salvaguardado por las comunidades indígenas, demarcado por la por la medida llamada 'Línea Negra' , la cual responde la Ley de Origen, Ley Natural y Derecho mayor reconocido por el Estado mediante el Decreto 1500/18.
“En este espacio hay muchos lugares sagrados donde se desarrollan prácticas y trabajos espirituales de distintas clases de enfermedades, además de pagamentos a la naturaleza, a la flora y fauna o pagamento con rituales al agua” comenta la comunidad.
El desespero ha llevado que todos se trasladaran a hacerles frente a este grupo, tomándose de manera permanente, el punto de extracción de oro. El viernes 8 de mayo se estableció como el día ultimatun para que el grupo ilegal detuviera sus labores y se desplazaran, sin embargo los mineros continúan a los alrededores de Arimaka.
“Estamos en pie de lucha, declaramos asamblea permanente como esto no se solucione”
Comentan los mediadores del proceso Jose Martín Barros Gil, Pedro Mojica, Jose y Antonio Mojica, quienes le comentaron a REGIONCARIBE.ORG que el mismo dia fueron amenzados.
“Se cumplieron las horas, llegó la policía nos acompañaron una hora más y después volvieron a salir los del grupo ilegal, quedando solo nosotros. A las 12 del mediodía llegaron 3 personas amenazando con machete y las 7 de la noche se encontraron 4 hombres armados” Comentaron los coordinadores de la comunidad.
Según los líderes de la comunidad en diferentes ocasiones se les ha comunicado al grupo que el espacio se considera sagrado para ellos y que este tipo de práctica va en contra de la cosmogonía Wiwa que busca proteger la naturaleza, considerándola sagrada, sin embargo a pesar de varios esfuerzos y de la detención de uno de ellos, el grupo regresa nuevamente a sus actividades, afirmando que no se irán debido al dinero invertido.
Llegando a sufrir la quema de varias casas espirituales .
“Se logró llamar al ejército y desde la 1 y las 2 de la madrugada se encuentran en el lugar, pedimos en a los medios de comunicación que estén allí mientras se soluciona el problema. También queremos tapar los huecos peligrosos que han quedado ahí, con ayuda de las corporaciones regionales"
Los coordinadores afirman que mientras los huecos de las excavaciones continúan abiertos, el grupo tiene la facilidad de continuar con práctica minera “Seguimos en la asamblea permanente en ese lugar y no nos vamos a mover mientras no le veamos la solución total a ese lugar, Estamos defendiendo nuestro territorio ancestral , nuestro espacio sagrado que tanto lo necesita”
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