Todo tipo de reacciones esperan los comerciantes a las afueras del estadio Metropolitano Roberto Meléndez. En menos de 24 horas la casa de la selección, vivirá una verdadera fiesta, a propósito del encuentro deportivo entre Colombia y Venezuela, por las eliminatorias de Rusia 2018. Las expectativas para algunos vendedores son altas. Jennifer, una de las vendedoras que hace cinco años está ubicada en Metro Plaza a las afueras del estadio metropolitano, se muestra muy optimista frente a las ventas y asegura que en su caso, éstas han venido en aumento desde la semana pasada. Para esta época en la que el equipo jugará en la ciudad, sus ingresos alcanzas los $200 mil a $300 mil pesos, depende de lo que se logre vender. Ella espera el mayor número de ventas este martes, día del partido, cuando turistas tanto nacionales como internacionales, se acercan a su negocio; al que llega desde las 8 de la mañana y se va a las 10 de la noche, con tal de ganar el sustento para mantener a su pequeña hija. Sin embargo otros aseguran que cuando juega el combinado nacional, las ventas decaen por la cantidad de vendedores que se congregan a las afueras del estadio Roberto Meléndez “hay más comerciantes que compradores cuando juega Colombia” afirmó uno de ellos. Como el caso de Osman, quien hace un año vende camisetas en un improvisado puesto sobre el andén colindante con la salida de la estación de Transmetro Joaquín Barrios Polo. A él no le ha ido muy bien y dice que por ahora todo ha estado quieto. “Ya mañana es que esperamos que haya movimiento” asegura este padre de dos pequeños de 1 y 3 años, que aspira alcanzar un ingreso de $100.000 que es lo que acostumbra a ganar en un día como este martes en el que juega la selección Colombia. Vendedores de bebidas y comidas
En el último puesto de cara a la vía principal, en el Metro Plaza donde se encuentran diversos negocios, está ubicado el de Luis, quien asegura que ahí las ventas están muy bajas y por eso ha recurrido a ubicar un puesto adicional con bebidas sobre el andén. “Esto no es como la gente cree que porque va a jugar el equipo hay muchas ventas. Cuando juega Colombia es cuando menos se vende porque vienen vendedores de todas partes” indicó el comerciante. En el negocio, Luis vende limonadas, jugos de tamarindo y patillas a $1.000 y $2.000. En un día normal vende entre $60.000 a $70.000, pero cuando juega la selección Colombia, las ventas decaen. “Esto es un desorden, vienen gente de Barranquilla, de Soledad, del mercado y ahora que estamos llenos de venezolanos, también. Aquí se vende más con un partido de Junior que uno de Colombia” explica Luis. Ana Isabel coincide con su compañero de ventas. Ella tiene un negocio donde vende arroz de pollo, arroz de cerdo, arroz de lisa, empanas y papas rellenas. Aunque sólo permanece en el lugar medio tiempo, asegura que cuando juega Colombia, llegan personas hasta de Cartagena para rebuscarse. Para ellos es un beneficio estar junto a la vía, ya que la gente llega y los taxistas hasta los conocen y llegan enseguida, contrario a lo que ocurre durante los partidos. A pesar de todo, debido a la temperatura de la ciudad, lo que más compran los asistentes al estadio Metropolitano Roberto Meléndez, son bebidas, por lo que esperan si bien no ganar lo de siempre, obtener ventas con las gaseosas, jugos y agua.
Opmerkingen