A raíz de los bochornosos hechos de intolerancia que tuvieron lugar en la playas de Santa Verónica, jurisdicción del municipio de Juan de Acosta el pasado fin de semana, las autoridades anunciaron una serie de medidas que los turistas deberán acatar para poder hacer uso de estos espacios. El objetivo es evitar que se presentan nuevas riñas entre comerciantes y visitantes.
La principal medida y la cual ha causado opiniones divididas y críticas especialmente de parte de los turistas, es la que le pone restricciones a los llamados "paseos de olla", los cuales deberán seguir un trámite que tardaría hasta ocho días hábiles. La medida fue anunciada por el alcalde de Juan de Acosta Carlos Higgins Villanueva.
Esta determinación se tomó debido a que este tipo de paseos que suelen ser en buses provenientes de otros municipios cercanos o desde Barranquilla los cuales suelen incluir comida en grandes cantidades, bebidas alcohólicas y música, generan una ganancia mínima para los restaurantes y negocios que están en la playas y en sus cercanías y además, en varias oportunidades terminan ocasionando disturbios y molestias como la ya mencionada batalla campal del pasado fin de semana.
El mandatario explicó que este tipo de paseos deberán realizar un proceso de autorización con ocho días de anticipación, en el que una persona asumirá la responsabilidad por los integrantes del paseo y asimismo deberá firmar unos documentos si se llegasen a presentar algún tipo de disturbio que perturbe la tranquilidad de la playa y de los otros visitantes.
Estos trámites se deberán realizar a través de las Secretarías del Interior o de Turismo de Juan de Acosta y se podrán hacer tanto de manera presencial como de manera virtual. “Buscamos mantener el orden, la seguridad y convivencia de turistas y de nuestros habitantes”, manifestó el alcalde Higgins.
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