Luego de que se presentara en la capital cordobesa una tendencia de baja en los indicadores en la ocupación de camas UCI y en la tasa contagio, la administración municipal anunció el fin de la medida que controlaba la circulación de la ciudadanía en espacios cerrados.
“Después de varios meses difíciles con el segundo pico de la pandemia, vemos una luz al final del túnel, desde hace varias semanas, pues se experimenta una notable disminución en cuanto a todos los indicadores que dan cuenta de la evolución del Covid-19”, comunicó el alcalde monteriano Carlos Ordosgoitia.
Y es que, según datos entregados por la Secretaria de Salud municipal, en la Unidad de Cuidados Intensivos COVID-19 hay actualmente 16 pacientes que representan un 16.67 % de ocupación; la hospitalización también va a la baja con 50 pacientes; en paralelo, la cifra de positividad bajó hasta un 2.44%.
“Seguiremos vigilantes de que se mantengan los aforos en establecimientos, no podemos bajar la guardia, la variante Delta nos respira en la nuca, y esperamos que no llegue a Montería”, dijo el alcalde.
Variante que, confirmada por el Ministerio de Salud representa un estado de alerta al ser esta una de las variantes de mayor contagio y consigo, peligrosidad; pues un estudio epidemiológico realizado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en Singapur concluye que las infecciones que causa se relacionan con más probabilidades de desarrollar neumonías, necesitar oxígeno, atención en unidades de cuidado intensivo y hasta de morir.
Actualmente, Montería espera nuevas asignaciones de vacunas para seguir con el plan de primeras dosis para mayores de 18 años, mientras tanto, “seguimos aplicando segundas dosis de Sinovac, Fpizer y AstraZeneca, y le pido a las terminales área y terrestre que sigan manteniendo las medidas de bioseguridad", concluyó Ordosgoitia.
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