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Nota por Madia Muskus
Según la Convención RAMSAR, se define “humedal” como el área terrestre que está saturada o inundada de agua en su artículo número “define una zona húmeda o humedal como cualquier extensión de marisma, pantano o turbera, o superficie cubierta de aguas, sean estas de régimen natural o artificial, permanentes o temporales, estancadas o corrientes, dulces, salobres o saladas, incluidas las extensiones de aguas marinas cuya profundidad en marea baja no exceda de seis metros" (Ramsar, 1971).
El Día Mundial de los Humedales conmemora la firma de la Convención sobre los Humedales en Ramsar (Irán) el 2 de febrero de 1971. Reconocido oficialmente por la Convención en 1997 y por las Naciones Unidas en 2021. Según el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible (MADS), en Colombia, hay 2.589.839 Hectáreas de humedales, representadas en áreas de cobertura de cuerpos de agua naturales continentales, hidrófitas continentales, lagunas costeras y manglares.
El Departamento del Atlántico cuenta con un volumen cercano a los 454.577.500 m3 de agua representada en ciénagas y pantanos. La cobertura total de los cuerpos de agua corresponde a 21.697 Hectáreas, divididos en 3 subzonas hidrográficas: Vertiente Occidental del Río Magdalena, Canal del Dique y Arroyos directos al Mar Caribe, con 17 humedales: Ciénaga de Mallorquín, Lago del Cisne o Ciénaga Rincón, Ciénaga Los Manatíes, Ciénaga Balboa, Embalse del Guajaro, Ciénaga de Luruaco, Ciénaga de Tocagua; Complejo Lagunar de Malambo, está constituido por tres ciénagas: La Bahía, Ciénaga Grande de Malambo y El Convento; Ciénaga de Sabanagrande, Ciénaga de Santo Tomas Ciénagas Luisa y larga, Ciénaga Uvero, Ciénaga Sanaguare y Ciénaga La Vieja. En el departamento del Atlántico en el año 2010 se excluye del RAMSAR, el área comprendida entre el Tajamar Occidental hasta el sur de Palmar de Varela; incluyéndose El Uvero de Ponedera hacia abajo y Los Manatíes.
Labores de pesca artesanal en la ciénaga Mallorquín.
Resulta conveniente mencionar que Barranquilla cuenta con un humedal con la declaratoria del Sistema Delta y Estuarino del Río Magdalena y Ciénaga Grande de Santa Marta (CSGSM) como Sitio Ramsar en 1998. En esta zona se encuentra la ciénaga de Mallorquín y el Tajamar de Bocas de Ceniza, los cuales por medio del decreto 3888 de 2009 tuvieron cambios en el área delimitada y declarada. La Ciénaga de Mallorquín es un ecosistema socioecológico, es decir, permitiendo escenarios de interacción entre los beneficios de la biodiversidad y las múltiples acciones humanas.
El tener conocimientos básicos de nuestros recursos ecosistémicos resulta necesario y urgente, esto genera conciencia y sensibilización ambiental además de que conocer estos ecosistemas locales ayuda a identificar las zonas más vulnerables tomando las medidas para prevenir o mitigar los impactos negativos de las actividades humanas, como la deforestación o la contaminación; así como la toma de decisiones a nivel comunitario y político que permitan conservar la biodiversidad, proteger los recursos naturales en pro de mejorar la calidad de vida de las poblaciones locales.
Por ello los Humedales solo cubriendo solo el 6% de la superficie terrestre, albergan una extraordinaria diversidad de vida, siendo el hogar del 40% de todas las especies conocidas. Estos ecosistemas desempeñan un papel crucial en la regulación del clima, la protección de las costas y la provisión de alimentos. Además, los humedales generan recursos cada año en servicios ecosistémicos como la pesca, el turismo y la regulación del agua. Sin embargo, la pérdida de estos ecosistemas amenaza la biodiversidad, la economía y el bienestar humano. A pesar de su importancia, los humedales están desapareciendo tres veces más rápido que los bosques, con una pérdida mundial del 35 % desde 1970. Por lo que resulta imperativo tomar medidas urgentes para proteger y restaurar estos valiosos ecosistemas.
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