El Gobierno Nacional destinó recursos por más de mil millones de pesos para intervenir en las zonas afectadas tras el paso del huracán IOTA en el departamento de Sucre, esto dado a que las comunidades sufrieron pérdidas materiales con desbordamientos de arroyos e inundaciones.
Con el objetivo de mitigar los efectos de la emergencia invernal en esta parte del país, el secretario de Infraestructura, Saúl Martínez Pineda, y el coordinador de la Unidad para la Gestión del Riesgo, Carlos Carrascal, representaron al departamento en la concesión de recursos por parte del Gobierno Nacional.
«Participamos de una mesa técnica para dragados y mitigación de inundaciones, donde socializamos el proyecto de dragado de Boca Cerrada, en San Onofre, para la consecución de los respectivos recursos económicos para su ejecución», indicó Saúl Martínez, secretario de Infraestructura del departamento de Sucre.
Las primeras gestiones dan cuenta de la aprobación por más de mil millones de pesos de la Unidad para la Gestión del Riesgo, que se orientarán a la recuperación hidráulica de los arroyos Amansaguapos, en Coveñas, y Guaimí, en Tolú, lo que va a evitar el desbordamiento y, por ende, las inundaciones de viviendas y la afectación de cultivos.
Según comunicó la entidad territorial, la oficina de Gestión del Riesgo y la Secretaría de Infraestructura vienen adelantando trabajos en la limpieza de los puntos críticos del arroyo Grande de Corozal, que hace contados días inundó varias viviendas de este municipio de la subregión Sabanas.
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