La creatividad florece entre la abundancia y la celebración de Polonuevo, municipio del Atlántico que celebra 266 años con el festival del níspero, esta fruta se puede encontrarse en todas las épocas del año, permitiendo a los cultivadores, recolectores y transformadores realizar diversas preparaciones y dinamizar la economía del municipio, territorio del que se abastece el mercado de la ciudad de Barranquilla.
Barranquilleros suelen comprar en grandes cadenas que venden mermeladas importadas por empresas que tienen como base otros países, logrando que llegue diversidad a su mesa pero qué tal si disfrutaran también de los sabores que se brinda en el territorio mas cercano, teniendo la oportunamente de deleitarse con un desayuno con pan, untado de una deliciosa mermelada de níspero hecho meticulosamente por las manos de matronas de Polonuevo o tal vez en un almuerzo con una poderosa carne asada con salsa chimichurri de la misma fruta, como también se puede degustar conservas de almíbar, jaleas, vinos, galletas y vinagre.
Esta diversidad en la mesa permite no solo que se desarrolle la economía de las familias de un territorio que le aporta a la alimentación de una ciudad tan pujante como es Barranquilla, sino que se logra aprovechar los sabores de nuestra propia tierra, esa que tanto nos enorgullece ser.
La Fundación familiar, Funnispero sueña con exportar los diversos productos que nacen de esta fruta tan abundante, aplicando el dicho popular; “si del cielo te caen limones, haz una limonada”, labor que realiza la familia emprendedora en cabeza del padre Jerson Blanco Tejeda, Polonuevero, quien con sus hijos, sobrinos y 5 matronas del municipio llevan cabo hace 8 años el Festival del Níspero y sus Derivados.
El coordinador del evento, Anderson Blanco Carrillo, heredero del legado de su padre Jerson Blanco, comenta que este es una labor que hace con orgullo al ser el primer representante de su padre como empresa familiar, sus estudios en laboratorista industrial le han permitido aportar en el proceso de calidad de la transformación de los productos gastronómicos.
“Este es un producto artesanal pero hay que hacerlo con las mejores condiciones higiénicas y la buena calidad de este producto que le voy a entregar al consumidor, porque uno nunca sabe el impacto que puede generar la comida. Yo también he trabajado en empresa de alimentos entonces entonces sé como es el cuidado y la inocuidad de los alimentos”
Cerca de Polonuevo se encuentran varias fincas de hectáreas de cultivos de níspero, los recolectores se encargan de comprar la fruta a los cultivadores, y estos a su vez llegan al mercado de Barranquilla o los venden a quienes transforman en deliciosos platos, como es el caso de la fundación. En el festival participan 70 familias de matronas y cocineros, trabajando en la producción de diversas recetas y 20 familias campesinas dedicadas a su producción y transformación.
La secretaría de Cultura y Patrimonio del Atlántico, Verónica Cantillo, afirmó que el níspero es el fruto estrella de Polonuevo porque representa mucho más que una fruta, es el sustento y orgullo de la comunidad. Aproximadamente el 80 % de habitantes se dedican a su cultivo, cuya cosecha se da los primeros meses del año y genera trabajo a los recolectores.
Festival
Jerson Blanco, líder de esta fundación tuvo como objetivo crear un espacio que integrara las manifestaciones culturales a través de la gastronomía, la música y las danzas tradicionales, y que realizará la importancia del níspero y sus derivados.
Entre su programación se encuentran ruedas de cumbias y presentación de orquestas y las ofertas van más allá de el níspero, también habrá productos de artesanos y artesanas
“La idea es mostrar lo bonito porque hay diferentes tipos de festivales y todo depende de cual es la visión que tu le des a ese festival y como lo manejas, esperemos a este año que todo salga bien porque me siento alegre porque no es fácil y apoyar la parte cultural , al patrimonio es bonito porque es rescatar y mostrar lo que tiene Polonuevo, lo que tiene cada municipio y corregimiento y de mostrar que cada municipio tiene algo bonito”.
Comenta Jerson
Jerson espera que el evento les genere 5 millones de ganancias, las cuales se reparten con matronas, quien una de ellas este año será homenajeada, Erminia Pindena, una matrona que ha dedicado su vida a la elaboración y transformación de productos derivados del níspero. Entre sus creaciones se destacan galletas, mermeladas y salsa chimichurri.
“Me siento orgullosa de mi pueblo por este homenaje. Yo le dedico este reconocimiento a mis compañeras que hacen parte del festival y a este peculiar y exótico sabor dulce con toques ácidos que hacen de nuestro níspero una fruta única e inconfundible. Me proyecto en otros países llevando mis productos para que los prueben y disfruten en todo el mundo”
Expresó Pineda.
De 7 am a 7 pm todo el equipo de la fundación trabaja duro y parejo, en esta semana elaborando productos frescos y trabajando por la logística del festival, un evento que sueña en grande en miras de exportar.
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